JUGANDO CON FUEGO

No dudes ni por un momento que fui yo quien decidió esos labios que tienes,
quien te metió en la cabeza el gusto por ese tatuaje en tu vientre y esa mirada
que te han servido para tener a tus pies a todos los hombres que has deseado;
soy yo quien ha jugado con fuego y no tú y ahora
de regreso a mi mundo de nubes blancas y cielo azul
quizá Dios me noté todo este alboroto, quizá al mirarme a los ojos
descubra mi secreto, la pasión que podría enviarme al infierno.
Tú, mi primera creación, sólo te he determinado vivir y ser feliz,
no dudes ni por un momento que no permitiré jamás
que algo o alguien lleguen a estropar alguna vez tu belleza.

Comentarios

Entradas populares