INCOMPLETO


Soy así, me imagino que he vivido otras vidas, que en alguna de ellas te encontré y al empezar de nuevo otra vida te perdí, sueño que en esta vida también me toca encontrarte, de entre todas las personas que estamos en el mundo, tú y yo, ¿te imaginas? Sueño que no queda mucho para ello, no importan los lugares donde estar, si trabajar 5 o 15 horas, importa despertar y verte ahí dormida, feliz, importa que tú eres la razón de mi vida y de mi existencia, importa que en algún lugar estás y que el momento se está haciendo y que sueño con ello despierto y dormido; tú y yo, ¿te imaginas? No sé cómo sucederá dónde en qué momento, si en esta vida o en otra, por dentro mi corazón quiere salirse de mí como si él supiera exactamente qué hacer o dónde estás, sabes que lo pongo todo de mí por llegar un día a mirarte a los ojos y que tú mires mis ojos también y los dos nos reconozcamos. Y sé que tú pones todo de ti también. Tú y yo, ¿te imaginas? Mientras tanto sigo incompleto, buscándote, tratando de saber dónde estás, quién eres tú.

Comentarios

freya ha dicho que…
¿Y si lo que sueñas que persigues no deja de ser eso, un sueño? ¿Merece la pena estar siempre dormido para buscarlo y perderse lo que uno vive mientras está despierto?
Y sin embargo,
dejar de buscarlo....
... eso no creo que merezca la pena...
no.
Tu sueño y tú, ¿sólo imaginación o también realidad?
Héctor Elías ha dicho que…
y... ¿merece la pena no luchar por aquello que realmente tiene importancia y peso?... cuando nos desvivimos por auténticas boberías estupideces nimierías cosas enormemente leves por las que lo damos todo...
yo no sueño... vivo... dentro del vivir también está imaginar y soñar... es algo tan humano como tener sentimientos... si soñar e imaginar es estar fuera de la realidad, también lo es querer y amar... YO TENGO MUY MUY MUY MUY CLARO LO QUE TIENE IMPORTANCIA EN LA VIDA Y LO QUE NO, Y AUNQUE MUERA SIN CONSEGUIRLO LUCHARE POR LO QUE CREO Y NO ME DEJARE LLEVAR CREYENDO QUE VIVO PORQUE SIGO LA CORRIENTE DE LOS DEMAS... todos morimos, pero no todos realmente vivimos... (aunque muchos crean que viven)
freya ha dicho que…
NO, no merece la pena dejar de luchar por aquello que es importante, aunque sea real solo en sueños, ya que los sueños forman parte (muy importante) de nuestras vidas.
no estoy muy segura de que no me hayas malinterpretado al leer mi comentario, es cierto que a veces es maravilloso poder perderse en el mundo interior de cada uno y vagar por esos sueños como si fueran tan reales que casi podemos tocarlos, soñar que son reales, incluso hacerlos reales.
Y me parece muy valiente que luches por ello.
¡Hay que vivir! (¿y acaso la vida no es sueño?)
Héctor Elías ha dicho que…
¿Malinterpretar?... ¿yo?... para nada...
¿valiente?... ¿yo?... tampoco...
Y vivir... sí, hay que vivir... pero no sé cómo entiendes tú el concepto: ¡Hay que vivir!
La verdad es que no sé muchas cosas de ti, porque haces comentarios pero no dicen de ti, son como palbras neutras y sí, me dicen que estás ahí, pero, ¿qué cosas sientes tú? ¿qué piensas tú de todo? ¿qué es para ti "la vida"?
¿cómo estás viviendo tú la vida? y... dime, ¿cómo te gustaría vivirla?
freya ha dicho que…
mmm... me estás haciendo pensar y mirar dentro de mí... me gusta que me plantees preguntas.
De acuerdo, voy a no emplear lo que tú llamas "palabras neutras" para explicarte (bueno, intentarlo) lo que es para mí LA VIDA. Hace unos años, coincidiendo con el final de mi carrera, que no es que fuera un camino de rosas precisamente, pasé por una depresión. No fue demasiado profunda ni duró mucho, afortunadamente detectaron que tenía que ver con alteraciones hormonales y la solución fue relativamente sencilla. La recuperación no fue de un día para otro, duró varios meses, y acabó con una crisis medio existencial. Tuve suerte, coincidió con el comienzo de las vacaciones en mi recién estrenado trabajo, y decidí coger un autobús a Ponferrada y caminar hacia Compostela, sola, mi mochila, el camino y yo. Y un cuaderno. Y me fui dando cuenta poco a poco de que lo que había hecho los meses, años anteriores, era pasar por la vida dejando que ella me llevara, no era la dueña de mi vida. Me di cuenta de que vivir intensamente era lo que estaba haciendo en ese mismo momento, utilizar mis cinco sentidos (y ese sexto que nos atribuyen a las mujeres) en cada paso que daba. Pensé mucho, observé mucho, escribí no tanto y escuché todo lo que pude. Y aprendí que para mí LA VIDA es eso, un caminar que nadie más puede hacer por nosotros hacia una meta que se nos puede hacer más o menos difícil; y en ese caminar nos encontramos con compañeros y los dejamos/nos dejan atrás; nos encontramos con paisajes que se quedan plasmados en nuestra retina para siempre, escuchamos sonidos con una nitidez inimaginable para la vida en las ciudades (en mi querido Madrid), olemos aromas que nos dejan sin palabras, sentimos la naturaleza como parte de nosotros y nosotros como parte inseparable de la naturaleza (ya ves, a pesar de vivir en una ciudad me gustaría ser una especie de "espíritu de los bosques").
De aquella experiencia hace ya casi cuatro años, y desde entonces trato de vivir la vida, y no de pasar por ella, con los cinco sentidos siempre despiertos, cosa que no es fácil cuando la rutina es despertador-coche-trabajo-coche-vuelta a casa-y más trabajo-dormir... apenas.Soñar... siempre.
Bueno, ya sabes algunas cosas más de mí... ¿sigues sin reconocerme?
Héctor Elías ha dicho que…
Haven't you seen?
Haven't you seen?
The ruins of our world

Yo podría contarte muchos muchos muchos momentos como el que tú me has contado, uno a veces guarda su intimidad y nunca cuenta ciertas cosas, creo que mis dos mejores amigos saben de qué hablo, saben de todos esos momentos que te podría contar,...

La vida es una palabra muy muy grande, caben tantas cosas dentro de ella, es como un enorme cajón desastre. Como ya te dije: todo el mundo muere, pero no todo el mundo vive realmente.

¿Por qué será que eso que dices de la rutina me suena?...

Se puede decir que he vivido muchas cosas inolvidables a pesar de todo tanto para lo bueno como para lo malo, y todas esas cosas buenas y malas han sido compartidas...

No entiendo la vida solo porque somos seres sociales nos guste o no. Vale que a veces necesitamos algo de nuestro espacio, unos más y otros menos. Pero si has visto Naúfrago alguna vez me entenderás en esto.

No creo en las casualidades porque en mi vida nunca nada ha sido casual. Yo vivo, porque la intensidad con que siento el mundo y la vida es enorme, porque la pasión que pongo en lo que hago y en mi día a día por muy rutina que sea es enorme. Vivo muy intensamente todo porque soy una persona enormemente sensible. Necesito escribir poemas de vez en cuando, necesito amar, necesito compartir la vida y las cosas, necesito mirar a los ojos de esa otra persona y sentir que es ella, necesito abrir los ojos y sentir que todo eso está ahí y que yo tengo que conquistarlo.

¿La rutina?... cuando alguien te hace feliz la rutina deja de ser rutina, simplemente llegar a casa ver esos ojitos que llevaban horas esperando, deseándote ver... aunque sean 2 horas y dormir, ¿sabes cuánto vale dormir cada día con alguien que amas y te ama hasta la muerte y hasta después de la muerte? Eso es algo impagable, eso vale el resto de los días que uno vive, eso lo vale todo,...
Por eso yo no entiendo de rutinas, a veces 5 minutos pueden justificar 80 años de días de trabajo duro... eso es lo que no entiende el mundo de ahora, eso es lo que no entienden el 99% de las mujeres y chicas de ahora,
las ruinas de nuestro mundo, probablemente sea el único tonto que lo vea así, puede ser. Quizá este planteamiento sea de otro tiempo. Creo que un día me lo planteé así: me da igual pegarme toda la vida sufriendo si con ello consigo estar a su lado. Lo demás son minucias.

Entradas populares